Cuatro corazones con freno y marcha atrás (Enrique Jardiel Poncela)

Enrique Jardiel Poncela estrena en 1936 la que es considerada su obra maestra "Cuatro corazones con freno y marcha atrás" en donde la dramaturgia de Jardiel alcanza su madurez interna, constituyendo la primera muestra de ese teatro de lo inverosímil que desde el principio había venido persiguiendo.

Torrente Ballester escribe "Jardiel Poncela acumula durante casi dos actos un número excesivo de acciones y situaciones inexplicables, muchas de ellas, sin otro matiz cómico que la pura sorpresa, y de pronto, al final, todo este batiburrillo cobra coherencia, se pone en pie, se explica y deja al descubierto una trama férreamente trabajada, una construcción rigurosa, aunque laberíntica". Empieza a escribir sin saber como va a terminar, combina con exuberante invención sucesos y más sucesos y hacia el final se siente en la obligación de atar todos los cabos.

Fotografías

Fotografía de 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás'
Fotografía de 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás'
Fotografía de 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás'
Fotografía de 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás'
Fotografía de 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás'
Fotografía de 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás'
Fotografía de 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás'
Fotografía de 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás'